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| " A PUNTO DE DESAPARECER" |
La solución para cualquier problemática en esta modernidad (y en el pasado) es abrazar los principios eternos. Estos los encontrarás en la Biblia. En ella encontrarás una verdadera respuesta, no sólo para este presente, sino incluso para un poco más allá del futuro, la eternidad.
El mundo en la actualidad se enfrenta a grandes dilemas -muchos causados por el pecado de la humanidad. El mundo hace ver que no hay solución (le llamaría fatalismo) o que la solución está en las mismas manos del hombre (humanismo). Otras más, pero ninguna apunta a Cristo; por tanto las posibles soluciones caerán como semilla en campo estéril, y no darán resultado.
Un pueblo de Alemania (Alwine), está a punto de desaparecer, cuenta con apenas 15 habitantes (en 2017). No tiene tiendas y el autobús rural no para allí. El poblado se enfrenta a un problema de poca población, ya no hay jóvenes, así que tendrán o están haciendo algo al respecto. Pero hay otros problemas que son aún más importantes, que enfrenta no sólo la juventud alemana, sino todos los jóvenes en este mundo; y que son de carácter -más que social- son de carácter eterno.
Uno de estos problemas es el aborto, no solamente aniquila el desarrollo de nuevas generaciones, talentos y nuevos integrantes para esta sociedad, sino que pecamos contra el Dador de vida, por rechazar y atentar contra la vida humana. La vida fue dada divinamente, es para compartirla con otros, no sólo para ser "yo" en este mundo, estériles, complaciéndonos, fracturados, lejanos, muertos en vida.
La Biblia dice lo opuesto a lo que todo este mundo proclama. Ella invita a que tengamos una vida abundante aquí en la tierra y una vida eterna, cuando Cristo venga (Romanos 6:23). De igual forma, invita a fructificar, a formar una familia, a contar con un compañero (a) de vida, con bellos retoños que también hablarán de la grandeza y del amor de Dios.
La Biblia no está en contra de la modernidad, sino contra todo aquello que el ser humano ame más que a Dios. Y es pecado todo aquello que nos separa de Dios; pero a pesar de esto, Dios ha provisto una solución a la condición humana (Romanos 8:10). Y es Cristo, pues él dará vida, él dará sentido y él dará propósito, amor y una vida fructífera (Juan 14:6) a todo aquel que responda a su llamado.
Él es la respuesta para el presente de los jóvenes, sanará su pasado y sobre todo tiene un futuro que de acuerdo a Su voluntad es bueno, agradable y perfecto (Romanos 12:2). Aunque todo augure que jóvenes valientes y determinados estén "a punto de desparecer", Dios puede levantar generaciones que le sigan y le honren en esta tierra ( Salmo 145:13).
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