III. El paradigma del privilegio

Si disfrutas de la emoción de un buen libro de suspenso, si aprecias la orientación de un libro de autoayuda que te hace reflexionar, si te apasiona la intriga de una novela policial, si te deleitas en las imágenes y emociones que uno encuentra en la más fina poesía, entonces no hay dudas de que te enamorarás de la Biblia. Son todas esas cosas y más, reunidas en un solo volumen imponente y transformador. Salmo 19:7-10. Si consideramos a la Biblia más deseable que el oro y más dulce que la miel, quizás estamos errando en algo. Tal vez, y esto es sólo una suposición, que sea nuestra actitud hacia la Biblia y no la Biblia en sí la que sea deprimente y negativa. Quizá sea ahora de que miremos las cosas de otra manera.
Conocí una palabra que no formaba parte de mi vocabulario: paradigma. También descubrí que esta palabra se suele emplear junto con la palabra cambio. Es probable que hayas escuchado la expresión cambio de paradigma, tal vez en exceso. UN cambio de paradigma es un cambio radical en perspectiva. Tomas una creencia, una filosofía o una suposición y la pones patas arriba. ¡por qué estoy dando toda esta información? Porque muchas personas necesitan cambiar su "juegos de suposiciones y perspectivas", que a menudo son negativos en lo que respecta a la Biblia. ¿Y si pudiéramos considerar la Biblia una bendición en vez de una carga, un tesoro en vez de una tarea? ¿Cambiaría la manera en que nos relacionamos con el libro de Dios, e incluso con Dios mismo? Estoy ´convencido de que cambiaría.
Esto es exactamente el cambio que muchas personas necesitan hacer en cuanto a la Biblia. La consideran árida e improductiva, y no se dan cuenta de que se trata de una fuente de infinitas riquezas imposibles de describir.
Si necesitas un cambio de paradigma en cuanto a la Biblia, considera las siguientes ideas:
Invierte en la Biblia y obtén retribución. Leer la Biblia es tedioso y aburrido si tu lo haces así; puede y debe ser el libro más excitante y cautivador que poseas. Si inviertes de ti en él (tu tiempo, energía, intelecto y creatividad) obtendrás inmensos dividendos en cada aspecto de tu vida.
Alimenta tu fascinación. La Biblia ofrece algo para cada uno, y provee cantidades considerables para los intereses e inclinaciones de cada persona en particular. Las Escrituras contienen historias más cautivantes que cualquiera haya escrito Shakespeare, Homero, Tolstoi o Melville; y otros más. La Biblia ofrece muchísimo para satisfacerte. En el proceso aprenderás más acerca de este Dios que nos pide que confiemos de todo corazón en él.
Cultivar una actitud de agradecimiento. San Pablo reconoció el poder de desarrollar gratitud y gozo. Sus escritos están salpicados de frases tales como "estén gozosos" y "den gracias en todo". Quizá Pablo comprendía la tendencia humana de dar por hecho esto de recibir cosas buenas o que se diluya el agradecimiento a medida de que pasa el tiempo. Cuando veamos el valor de las Sagradas Escrituras y las muchas maneras en que enriquecen nuestra vida sabremos que este libro no es una carga sino una bendición.
Rodéate de aquellos que aman la Biblia. Nehemías 8:1-8. El entusiasmo es contagioso y cuando tú te asocias con compañeros entusiasmados con la Biblia, seguramente crecerá tu nivel de entusiasmo. Reúnete con amigos y vecinos en una casa. Dios honrará su deseo de aprender y les hablará a través de la Biblia.
Primero y principal, mira el libro. En aquella época de confusión, de dolor y de búsqueda en mi vida, tuve una vislumbre de lo que la Biblia puede hacer. Esta brinda consuelo, brinda sabiduría y brinda orientación. Es el primer lugar donde recurrir en momentos de tristeza o de felicidad. Si alguna parte de ti considera a la Biblia como una obligación y un requisito, te pido que lo consideres. La Santa Biblia es un verdadero privilegio para disfruta , un regalo para saborear.

ACERCA DEL AUTOR: Mike Macintosh
Leer artículo completo: Enamorándome de la Biblia
Leer Capítulo IV. Fíjate en las indicaciones

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entradas populares